Condiciones generales de Rollatoronline
Sin perjuicio de las condiciones especiales que hayamos formulado o aceptado expresamente por escrito, los contratos celebrados con nuestros clientes están exclusivamente regidos por las siguientes condiciones generales:
Cada pedido de un cliente nos vincula únicamente en la medida en que lo confirmemos dentro de los ocho días posteriores a su recepción.
El plazo de entrega y ejecución que mencionamos es meramente indicativo y, por tanto, no vinculante. Un retraso en la entrega y/o ejecución no da derecho a la cancelación de un pedido ni a ninguna compensación.
Nos reservamos el derecho de cancelar cualquier pedido, incluso si ha sido confirmado por nosotros, sin indemnización, si el contrato que nos vincula con nuestro propio proveedor se resuelve o si nuestro proveedor incumple en el suministro.
Salvo disposición contradictoria especial que aceptemos por escrito, la entrega de nuestros bienes se realiza en nuestras instalaciones. Una vez que los bienes están en posesión del cliente, los riesgos correspondientes se transfieren a él.
Si aceptamos entregar nuestros bienes en la casa del cliente, el transporte será asegurado por nosotros o por cualquier transportista de nuestra elección, mientras que la carga deberá ser realizada exclusivamente por el cliente. En cualquier caso, los bienes son transportados bajo el riesgo del cliente.
Los bienes que suministramos y los servicios que realizamos se presumen conformes, recibidos y totalmente aceptados en ausencia de una queja detallada del cliente enviada por carta recomendada con acuse de recibo dentro de los ocho días siguientes a su entrega. El uso por parte del cliente de la totalidad o parte de nuestros bienes implica de pleno derecho la recepción y aprobación de todos estos bienes.
En todos los casos en los que nuestra responsabilidad contractual y/o cuasi-delictual pudiera ser establecida, esta se limita como máximo al importe del precio que ya se ha recibido por los bienes y/o servicios que, en su caso, no serían conformes o defectuosos. Sin embargo, nos reservamos la posibilidad de limitar nuestra garantía a la renovación de los bienes defectuosos o a la mejora de los servicios mal ejecutados. Contra nosotros no podrá invocarse ninguna garantía si, sin nuestro consentimiento, el cliente o un tercero realiza una intervención en los bienes que hemos suministrado o en los servicios que hemos realizado.
Aunque se hayan entregado, nuestros bienes y sus accesorios siguen siendo de nuestra exclusiva propiedad mientras el cliente no haya cumplido con la totalidad de sus obligaciones. Hasta el pago completo del precio total adeudado, el cliente, por tanto, no podrá disponer de nuestros bienes y se le prohíbe formalmente venderlos o darles en prenda a un tercero. Los riesgos relacionados con nuestros bienes se transfieren al cliente el día en que se ponen a su disposición.
Nuestras facturas son pagaderas en nuestra sede social, en efectivo, netas y sin descuento. En caso de impago de una factura en su fecha de vencimiento, estamos legalmente autorizados, sin necesidad de previo aviso, a suspender la entrega de bienes y/o la realización de los servicios pedidos, e incluso a cancelar el contrato correspondiente en detrimento exclusivo del cliente. Dado que nuestros eventuales agentes y representantes no están autorizados a recibir el pago de nuestras facturas, los pagos en sus manos no son oponibles a nosotros.
El impago de nuestras facturas en su fecha de vencimiento conlleva automáticamente, sin necesidad de aviso, la obligación de intereses moratorios al tipo de interés del 1,2% mensual, así como una indemnización convencional forfaitaria del 15% de los importes adeudados, con un mínimo de € 75, sin perjuicio de todos los daños reales que superen esta cantidad, para los cuales nos reservamos la posibilidad de reclamar indemnización.
En caso de impago por parte de un cliente en la fecha de vencimiento de una factura que hayamos emitido o de un pagaré, sea quien sea el beneficiario, todas las sumas que nos deba este cliente serán exigibles de inmediato y de pleno derecho, incluyendo las facturas aún no vencidas. En caso de crédito inestable de un cliente, de cualquier medida de ejecución judicial en su contra o de cualquier evento que ponga en cuestión la buena ejecución de sus obligaciones, nos reservamos el derecho, por un lado, de suspender la ejecución de su pedido de pleno derecho, incluso después de haber comenzado la ejecución del contrato correspondiente, y, por otro lado, de exigirle todas las garantías que consideremos necesarias. Si este cliente no proporciona las garantías exigidas, podremos disolver de pleno derecho el contrato celebrado con él, sin perjuicio de la indemnización que podamos reclamarle.
Los contratos que celebramos están regidos exclusivamente por el derecho belga y cualquier disputa al respecto pertenece a la jurisdicción exclusiva de los tribunales que forman parte de la competencia de nuestra sede social.
Las condiciones generales mencionadas anteriormente se consideran aceptadas por el cliente, incluso si son contradictorias con sus propias condiciones generales o especiales, incluso si están mencionadas en su orden de pedido. Por tanto, las condiciones generales y especiales de nuestros contratistas no nos son oponibles salvo aceptación expresa por escrito por nuestra parte.